La decisión de Riquelme que estalló entre los hinchas de Boca antes del Superclásico
Captado por las cámaras de TNT Sports, Juan Román Riquelme se acercó a la Legislatura para despedir a Hugo Gatti y se quedó sacándose fotos con los hinchas de Boca.
Riquelme, presente en el velorio de Hugo Gatti
Por supuesto que todos los focos están puestos en el Superclásico del próximo domingo en el Monumental, y Juan Román Riquelme sigue llevándose las miradas en medio de un buen momento de Boca. Ahora bien, antes del esperado choque ante River, el Presidente tomó una decisión, y generó repercusión entre los hinchas Xeneizes.
Más allá de la conmoción mundial que provocó el fallecimiento del Papa Francisco en la madrugada de lunes, el ambiente del fútbol también se vio conmovido por lo sucedido con Hugo Orlando Gatti, quien perdió la vida este domingo. Así las cosas, el velorio tuvo lugar ayer en la Legislatura Porteña, y contó con la presencia de varias personalidades del deporte.
Ubaldo Fillol, Jorge Higuaín, Quique Hrabina, entre otros fueron captados por las cámaras de TNT Sports en el lugar. Pero obviamente quien llamó especialmente la atención fue Juan Román Riquelme. Es que el Presidente de Boca no quiso perderse la oportunidad de darle el último adiós al Loco y permaneció un rato en el velorio. Mientras que se juntó una multitud para saludarlo.
Riquelme se despidió de Gatti
En este contexto, a pesar de la tristeza lógica por el fallecimiento de Gatti, Riquelme se quedó sacándose fotos con la gente y después se retiró. Motivo por el cual volvió a quedar en el centro de la escena justo en la antesala del Superclásico frente a River por la fecha 15 del Apertura.
La tristeza de Navarro Montoya por el Loco Gatti
"Fue la luz que alumbró mi niñez, yo deseaba ser Hugo. Tengo fotos jugando en Vélez con una vincha. Motorizó y estimuló mis sueños. Era de pocas palabras, huraño. Fue duro conmigo al principio, pero él les recomendó a Antonio Alegre y a Carlos Heller que me llevaran porque visualizaba que podía sustituirlo”, inició el Mono.
Luego, agregó: “Me tocó competir con Hugo, llegué y en la pretemporada jugaba yo porque él tenía un problema en el hombro. El campeonato lo comenzó él y no le fue bien. Entonces, José Pastoriza (entrenador de aquel momento) me puso a mí”.
“Él siempre decía que él era el mejor. Me llenaba de cumplidos, pero decía: ´Mira, Monito, que soy el número uno’. Y tenía razón. No tengo vergüenza en decir que lo copié. Un día me dijo: 'Monito, los golpes quitan años. No se necesita volar ni hacer cosas raras'. Él jugó hasta los 44 y yo hasta los 43", afirmó el ex arquero.
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